El Sábado 6 de Agosto disfrutamos del tercer Festival de Barriletes y Cometas Acrobáticas denominado ¡Un Barrilete, un Niño Feliz!
Si bien de forma habitual participamos en todos los Festivales junto con nuestros amigos de Alto Vuelo y la Secretaría de Cultura, Deportes y Turismo de la Municipalidad de Vicente López, en particular éste, tuvo un matiz muy especial.
Uds. se preguntarán ¿por qué?

Bueno, es que fue pensado principalmente para el protagonismo de los Niños.
Debido a ello nos tocó vivir una tarea muy difícil de realizar en el campo de vuelo: Amalgamar el entusiasmo y disciplina que nos caracteriza junto a la ansiedad y desenfreno de quienes por primera vez sentían en carne propia lo que nosotros, los Batoqueros, estamos habituados a sentir cuando ponemos en el aire nuestras máquinas voladoras.
Así comenzamos con Sedai Band (conjunto de Rock Japonés con amplia trayectoria en nuestro País y reconocido prestigio en la comunidad Japonesa), tocando en vivo piezas de su propia producción.
Para ponerse a tiro... fue la Banda que le enseñó a Alfredo Casero a cantar en japonés el exitoso tema Shimauta. El estreno de Shimauta se realizó hace algunos años en el Jardín Japonés frente a más de 5000 personas donde Sedai Band actúo como banda soporte.
A las 13:00 horas abrió sus puertas el Taller “Gratuito” de Construcción y Decoración de Barriletes, donde los niños... y algunos no tanto... se llevaban el Barrilete de regalo listo para volar.
Luego continuamos sumando adrenalina a la fiesta con la Lluvia de Caramelos; Juegos con Barriletes; Sorteos de Deltas, Acrobáticos y Golosinas... y para completar la mezcla explosiva actuaron los personajes “Don Eddy”. (Barriletes vivientes que interactuaban de forma permanente con todos los Niños)
La verdad es que quien no esperaba “DESENFRENO”, no le corre sangre por las venas.
Amigos, como primera reflexión me permito decir que “Los Barriletes y las Cometas Acrobáticas mueven montañas”
Ahora les comento algo sobre el clima.
Sol, mucho frío, viento helado del SO, por momentos demasiado fuerte y por momentos demasiado débil.

Estas condiciones no son las que más le agradan al público, que a pesar de ellas, se quedó disfrutando del Festival - viendo las demostraciones y volando los barriletes construidos en el taller - hasta la puesta del sol.
Segunda reflexión: “Dios sigue siendo Argentino y Barriletero”
Pasadas las 15: 30 comenzamos con las demostraciones.
Algunas fueron suspendidas por falta de tiempo y exceso de viento, otras las pudimos realizar incorporando a las tradicionales rutinas, maniobras “no deseadas” por las travesuras de Eolo, quedando elegantes y originales a la hora de recibir el aplauso.
Amigos, definitivamente sumamos otro éxito con reconocimiento del público que participó esa tarde. Ellos son en definitiva quienes nos marcaran el camino.
Ahora nos espera el último desafío... ¡ para éste año !... : “La Fiesta del Viento 2005”
Pongamos mayor entusiasmo y a mover todas nuestras neuronas; tenemos que superar cada vez más las expectativas de nuestros anfitriones: “El Público”
Un abrazo,